Feria de Adra
Los orígenes de la feria de Adra como hoy la conocemos se remontan a 1853 cuando la reina Isabel II concede la Feria de Ganado a celebrar los dias 4, 5 y 6 de septiembre.En los primeros años la Feria se celebraba en honor a la Virgen del Mar, que siempre fue venerada, y su emplazamiento estaba localizado entorno a la C/San Sebastián, la Plaza del mismo nombre, el Camino del Lugar, la rambla de las Cruces y la antigua carrera de la Playa (hoy Natalio Rivas). Si se observa, el emplazamiento coincide con el perimetro extramuros que rodeaba las murallas de Adra La Nueva. Con anterioridad los festejos de Adra giraban entorno a la celebración de Moros y Cristianos a principios de septiembre. Pero estas fiestas recobrarán importancia y perdurarán hasta nuestros días en los últimos días de agosto y primeros de septiembre en la barriada de La Alquería, antigua "Adra La Vieja".La elección en 1864 por parte de la ciudad de Adra de San Nicolás de Tolentino como patrón y su ratificación en 1865 por el Papa Pío IX extiende progresivamente la duración de la Feria al 10 de septiembre, día de San Nicolás y conmemora la festividad de la Virgen del Mar el 8 de septiembre.
El Real de la Feria
Desde la Feria de ganado de mediados de siglo XIX hasta el emplazamiento actual, el Real de la Feria ha ocupado lugares diferentes en función de las ampliaciones sucesivas debido al crecimiento de la población.Durante muchos años, la Rambla de las Cruces y la Carrera cortada a un exiguo tráfico rodado eran la ubicación de toda clase de tratantes de ganado y puestos de turrón y helados. La verbena popular estuvo localizada en la Puerta del Mar en la plazoleta junto al desaparecido bar La Granja. Los cacharricos y demás atracciones se situaban en una plaza existente en el solar que ocupa el edificio del casino de invierno.En los años sesenta la feria evoluciona y sobre todo las atracciones (tómbola, cristobicas, noria, cunicas...) se sitúan en el "Campo de Futbol", antiguo campo de deportes, donde hoy se sitúa el polideportivo municipal de la calle Tarrasa.A principios de los setenta la Feria se traslada al puerto, a la zona portuaria más próxima al espigón de Levante, donde se ubica el actual mercadillo. Se trata ya de un Real de la Feria más extenso en el que a mediados de los setenta aparecen las primeras casetas, marcadas por los acontecimientos políticos de entonces. La caseta municipal y los festivales de música, teatro y flamenco se trasladan al polideportivo de la calle Tarrasa.Ya a mediados de los 80 empujada por el crecimiento del municipio la Feria se traslada a su emplazamiento actual a unos terrenos ubicados junto al muelle pesquero de Poniente y el pabellón cubierto. Las atracciones, las casetas, las actuaciones de la caseta municipal y una amplia zona de aparcamientos hacen de este gran solar su emplazamiento definitivo por el momento. En los últimos años, a la tradicional Feria de noche y madrugada que termina con un buen chocolate con churros se ha sumado la Feria del Mediodía. Se trata de una ruta de tapeo y degustación de la amplia cocina abderitana a lo largo de los bares más importantes del pueblo, que sacan sus mesas y sillas a la calle y son los protagonistas de la vida callejera desde la una a las seis de la tarde.
Gigantes y Cabezudos
La Feria ha evolucionado y ha crecido hasta asemejarse a la de cualquier ciudad del Sur. Pero hay cosas que no han cambiado y tradiciones que han sobrevivido a las innovaciones. Los Gigantes y Cabezudos que recorren el pueblo con música y cohetes seguidos por decenas de niños a las 10 de la mañana durante cuatro días son una de esas costumbres.La lectura del pregón desde el balcón del ayuntamiento, la proclamación de la Reina de las Fiestas, el lanzamiento del castañazo (cohete de pólvora de gran estruendo) y la posterior Cabalgata de Carrozas y comparsas en la noche del 6 de septiembre, sigue teniendo un protagonismo propio en cada edición. El traslado de los patronos de Adra, desde la ermita de San Sebastian a la Iglesia de la Inmaculada, con el tradicional castillo de fuegos artificiales en la rambla Zarzal bajo la ermita, sigue su cita fiel cada 7 de septiembre.El día 8 es fiesta local. El ecuador de la feria. El día de la moraga de sardinas asadas con pan, vino y cerveza en el puerto a la una de la tarde. Por la noche tras la misa en honor de la Virgen del Mar (en cuyo honor es día de fiesta) se traslada en procesión desde la iglesia de la Inmaculada al puerto donde será embarcada en una traiña (barco de cerco) junto a San Nicolás. Durante el paseo en barco por el interior del puerto tiene lugar el castillo de fuegos artificiales que se quema en el espigón de Poniente.El día 9 es el día de las carreras de sacos y cintas, del paseo de caballos y del festival náutico con cucañas engrasadas que sólo unos pocos conseguirán superar para conseguir los premios. El festival marítimo concluye con la carrera de botes y la travesía a nado de la bocana del puerto.El día 10 es el día de San Nicolás. De nuevo fiesta local. Tras la santa misa de las ocho de la tarde, se bendicen y reparten los panecillos de San Nicolás. A continuación tienen lugar la procesión con el recorrido tradicional por el casco antiguo de la ciudad. San Nicolás y la Virgen del Mar volverán a la ermita de San Sebastián. Ya metidos en el día 11 de septiembre, la gran traca de las dos de la madrugada desde el espigón de Poniente anuncia el final de las fiestas.
Moros y Cristianos de La Alquería
Por su proximidad en el calendario a la Feria de Adra, las fiestas de Moros y Cristianos de La Alquería , que se celebran en el último fin de semana de agosto (a escasos días del comienzo de las abderitanas) constituyen un preámbulo de muchas jornadas de diversión.Las Fiestas de Moros y Cristianos, recuerdan los avatares históricos de Adra La Vieja, durante los últimos años de la Conquista del Reino de Granada y a mediados del siglo XVI con las Guerras Moriscas.En el acervo popular queda la imagen del Moro a caballo o en mulo que lee el manifiesto para la rendición del ejército cristiano y la respuesta en sentido inverso del capitán Cristiano, que en más de una ocasión ha olvidado el anacronismo y ha aparecido en traje de la mili en lugar de las túnicas y la cota de malla de la Edad Media. El lecho seco del río es el lugar del campo de batalla y los cohetes y petardos son la munición de los ejércitos.
Del 5 de septiembre al 10 de septiembre.
lunes, 16 de abril de 2007
Ferias para visitar
Etiquetas: información a las 3:31
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